08
Oct
Rehabilitar vivienda

¿Es lo mismo una rehabilitación que la reforma de una vivienda? Son términos similares, pero cada uno tiene su singularidad. Rehabilitar una vivienda implica una actuación de mayor envergadura que una reforma. Además, las ayudas y subvenciones que conceden las instituciones pueden ser distintas para cada una de ellas.

El Gobierno Vasco, en su Decreto 317/2002, de 30 de diciembre, define la rehabilitación como aquella obra “constituida por una o varias intervenciones sobre el patrimonio urbanizado y edificado al objeto de conseguir su puesta en valor y su más adecuada utilización”. En esta categoría entrarían, entre otras, la adecuación de elementos comunes o privados de edificios, viviendas o locales para mejorar la habitabilidad de los mismos o la adecuación para personas con minusvalías. Así, dentro de este tipo de acciones se pueden incluir también el aislamiento térmico del exterior de las fachadas, la impermeabilización de cubiertas, la instalación de un ascensor…

Rehabilitación de vivienda, instalación de un ascensor

No está tan clara, sin embargo, una definición consensuada de lo que sería una reforma. En base a lo expuesto anteriormente, se hablaría de reforma cuando la obra atañe a aspectos de menor calibre que tengan que ver más con la estética o con pequeños deterioros de la vivienda o del edificio y no tengan que ver con la estructura, con la instalación de gas o electricidad, o con los tabiques del edificio.

Una de las cosas que tienen en común tanto una reforma como una rehabilitación es que ambas (aunque en el caso de la reforma, si la actuación es de poca envergadura no es necesario) requieren de una licencia municipal otorgada por el ayuntamiento al que pertenezca el espacio sobre el que se va a realizar la obra. Cada consistorio tiene su proceder y hay que informarse en sus oficinas (ya sean virtuales o físicas) de los procedimientos de cada uno. Esta licencia la puede solicitar tanto la persona física, como la jurídica o su representante legal y se pueden solicitar durante todo el año.

Subvenciones para reformar viviendas o rehabilitación de edificios

Asimismo, como comentamos en un post anterior, en Euskadi, el Gobierno Vasco concede subvenciones para la rehabilitación de edificios siempre que se cumplan una serie de requisitos como, por ejemplo, que los edificios a rehabilitar tengan una antigüedad superior a 10 años (excepto si se trata de rehabilitación para personas minusválidas o instalación de gas natural). También son requisitos de obligado cumplimiento, que la rehabilitación se realice por el propietario, arrendatario o usufructuario de la vivienda. Para tener derecho a una subvención, los solicitantes deben tener ingresos familiares no superiores a 21.000€. El plazo de estas ayudas finaliza el 31 de diciembre del próximo año 2020.

Rehabilitación de vivienda, aislamiento térmico del exterior de las fachadas

Deducciones en Gipuzkoa por reformas de viviendas

Por lo que se refiere a las deducciones en la Declaración de la Renta en nuestro Territorio Histórico, según el Departamento de Hacienda de la Diputación Foral de Gipuzkoa, las obras de rehabilitación tienen derecho a deducción si las cantidades son destinadas a: ampliación de vivienda, construcción, adquisición del derecho de superficie, o a obras e instalaciones de adecuación y modificación del edificio que se realicen en la vivienda habitual de personas minusválidas.

  • Ampliación de vivienda: para ello es necesario que se aumente la superficie habitual de la misma de forma permanente. Esta ampliación puede hacerse o bien cerrando la parte descubierta (balcones, terrazas…), o bien por cualquier otro medio.
  • Construcción: para ello es necesario que el contribuyente pague directamente los gastos de obra o que entregue cantidades a cuenta al promotor de la misma, siempre que las obras finalicen antes de cuatro años desde el inicio de la inversión.
  • Adquisición del derecho de superficie del inmueble que vaya a constituir su vivienda habitual, cuando el mismo se haya construido sobre un suelo de titularidad pública.
  • Adecuación para personas de movilidad reducida: las obras e instalaciones de adecuación en la vivienda habitual, así como las de modificación de los elementos comunes del edificio tales como escaleras, ascensores, dispositivos electrónicos, pasillos, portales o cualquier otro elemento arquitectónico que sirvan para superar barreras de comunicación sensorial o de promoción de seguridad de los minusválidos.

Rehabilitación de vivienda: aísla tu casa para ahorrar y vivir mejor con una reforma bien ejecutada

Reformar viviendas para mejora del aislamiento

La rehabilitación de una vivienda es siempre una inversión segura. Aprovecha cualquier reforma para aislar tu vivienda porque no sólo ahorrarás notablemente en tu factura de la luz o el gas, sino también conseguirás una casa más saludable, libre del frío y de la humedad.

Según datos del organismo público IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía), una reforma de vivienda con un buen diseño bioclimático puede conseguir ahorros de hasta el 70% en la climatización e iluminación del hogar.

Cada vivienda de la Comunidad Autónoma Vasca emite, aproximadamente, 14 kilos diarios de CO2 a la atmósfera, lo que equivale a 5 toneladas al año. En Donostia y el País Vasco gastamos de media unos 700 euros anuales en la factura de la luz o del gas. Las calefacciones y los aparatos de aire acondicionado suponen dos tercios del consumo total de energía de un edificio, es decir más del 40%. Un pago que se puede reducir considerablemente al reformar la vivienda y conseguir un buen aislamiento.

Rehabilitar térmicamente un edificio no es ni complicado ni tiene un coste económico elevado y, desde luego, los beneficios del aislamiento térmico compensan con creces todos los pequeños inconvenientes que puede acarrear el acometer una obra en una vivienda. Una casa o un edificio se aísla incorporando materiales aislantes en sus muros exteriores, cubiertas, suelos, tabiques y huecos.

Claves para mejorar el aislamiento de tu hogar con la reforma de tu vivienda

Para conseguir una mayor eficiencia energética y un  menor gasto en la factura del hogar, puedes optar por seguir una serie de consejos a la hora de reformar tu vivienda:

  • Coloca ventanas de doble o triple acristalamiento para conseguir aislar tanto la temperatura como los ruidos, con rotura de puente térmico y con posibilidad de que sean batientes. Las ventanas pueden causar la pérdida de hasta un 30% de la energía del hogar.
  • Las cajas de las persianas y de sus correas también deben aislarse porque son un coladero de corrientes.
  • Es necesario que aísles también los techos, suelos y paredes con materiales de calidad y eficientes. Los muros pueden causar un 25% de los escapes de aire y por el suelo se escapa el 3% de la energía del hogar.
  • Elige pinturas aislantes naturales que no sean tóxicas y que sean sostenibles con el medio ambiente.
  • Si la puerta de entrada de tu casa tiene fugas de aire, cámbiala por otra puerta estanca.
  • El aire acondicionado, los radiadores, las estufas y la calefacción son los aparatos que más energía consumen. Elige aparatos de alta eficiencia energética. Lo ideal sería tener una caldera de condensación (cuesta entre 1.500 y 2.000 euros) y un buen termostato (no cuesta más de 200 euros) para regular la temperatura. Recuerda que una casa se debe mantenerse entre 20 y 22 grados centígrados. Nunca más de 25ºC, con cada grado de más que sobrepase este intervalo, estarás aumentando considerablemente tu factura energética.

Rehabilitación de viviendas

Si vendes o alquilas necesitas el certificado energético

Al reformar tu vivienda o rehabilitar tu edificio, ten en cuenta, como decíamos en artículos anteriores: desde el año 2013 para vender o alquilar una vivienda o un local es necesario tener el Certificado de Eficiencia Energética. Este certificado, que hay que renovar cada 10 años, evalúa la eficiencia energética del edificio calificándolo con una letra que varía desde la A, para los edificios más eficientes, hasta la G, para los menos. Y, además, debe incluir recomendaciones para la mejora de la eficiencia energética del mismo. No tener este certificado acarrea multas que van desde los 300 euros, la más leve, hasta los 6.000 euros si la multa es de carácter grave.

Por otra parte, la entrada en vigor del Real Decreto 314/2006, por el que se aprueba el Código técnico de la Edificación (CTE) pretende, entre otras cosas, reducir el consumo energético de los edificios mediante una legislación más exigente.

Si necesitas una rehabilitación o simplemente reformar tu vivienda tienes que tener en cuenta muchos factores a la hora de diseñar, planear y ejecutar una obra de rehabilitación. Contar con la experiencia de una empresa constructora como Gurtek, especializada en la rehabilitación de edificios y viviendas, será fundamental para conseguir los resultados esperados. Escríbenos o llámanos para que podamos ayudarte.